He estado esperando durante estos días (desde el domingo) con la intención de recabar alguna foto más de la prueba, pero, a fecha de hoy, la organización aún no ha publicado ninguna (que yo haya sido capaz de encontrar), por lo que me decido ha escribir este artículo basándome en lo que tengo y con mis propias fotos, que son pocas y algunas bastante malas, pero tendrán que valer.
Como ya sabéis, la martxa se celebró el domingo día 30 de Marzo a las 08:30 horas, teniendo como punto de partida el restaurante Arita Berri, situado en las afueras de Ereño.
En lo climatológico, el día resultó muy bueno, con 15º a la hora de la salida, aunque la sensación térmica era un poco más fría debido a que corría bastante viento, que posteriormente no resultó especialmente molesto.
Desde el mismo momento de la llegada en coche, la organización resultó perfecta, facilitándonos el aparcamiento de manera rápida.
Lo mismo se puede decir de las acreditaciones: Fácil, rápido y sencillo. Como debe ser.
Después de esto, lo de rigor: Un cafecito para entonar y la "visita a roca", para evitar posteriores urgencias. Por cierto, un acierto muy grande con la elección del lugar de salida: Arita Berri Jatetxea dispone de las instalaciones más adecuadas para ello y además abierto desde primera hora y con un camarero más que amable. (Perdonar la mala calidad de la foto pero me daba "corte" molestar con el flash).
...Y a esperar el momento de la salida...
Bueno, algunos..., ya que muchos fueron saliendo a su "bola"...
Poco después y sin aviso previo, la gente se fue moviendo en bloque y todos comenzamos la martxa.
Los primeros minutos resultaron bastante lentos ya que a los pocos metros de la salida, el recorrido se estrechaba en un sendero en cuesta y esto produjo pequeños atascos que ralentizaban el ritmo.
Esto a mi no me vino mal ya que al tratarse de mi primera salida "oficial" al monte, mi intención era coger ritmo poco a poco para calentar y después correr lo que pudiese. De cualquier forma, poco a poco los atascos se deshicieron y el ritmo fue aumentando, estirándose y permitiendo los adelantamientos con lo que cada cual podía elegir su ritmo.
Tras atravesar una zona de canteras, llegamos a la altura de Ereño...
Ya con espacio, el ritmo se fue incrementando y se fue ganando altura rápidamente.
Y a partir de aquí también se establecieron claramente los dos tipos de participantes: Los que acudieron a pasar una bonita mañana de monte, disfrutando sin prisas y los que fuimos a "darnos caña", en muchos casos, preparando otras pruebas....Por delante la velocidad aumenta y los espacios son cada vez mayores.
Primer avituallamiento: Bebida isotónica y personal muy amable. Una corta parada y a "seguirle dando".
En general, el terreno no resultó fácil, presentándose zonas bastante técnicas, con tramos embarrados debido a las lluvias de los días anteriores, espacios de pisada dudosa por la presencia de piedras, aunque también hubo zonas de hormigón y asfalto, pero en términos generales predominó el terreno difícil.
El perfil me pareció bastante duro (igual es por el momento de la temporada en que me encuentro) ya que presentaba poquísimos tramos de llano, encontrando constantes subidas (algunas muy duras) y bajadas.
La verdad es que se alcanzan bastantes cimas que si bien no tienen grandes alturas, conforman un perfil en dientes de sierra que castiga de manera constante las piernas.
2º Avituallamiento. Este también con comida. Tomo un poco de plátano y de tomate, bebo un vaso de bebida isotónica y continúo. El personal de la organización, simpático y amable. De "10".
A partir de aquí preciosos parajes que me obligan a parar continuamente para hacer fotos. Valorar por vosotros mismos:
Tras recorrer un tramo por este precioso valle de Oma, el recorrido vuelve a internarse en el monte abandonando el hormigón.
Tercer y último avituallamiento.
A estas alturas ya nos habían alcanzado (y superado) los primeros corredores, por lo que añadiendo que los marchadores que podías encontrar aquí también iban corriendo, la selección estaba hecha y la prueba iba realmente rápida.
Inicio de la última subida al Ereñozar. No muy larga, pero muy dura...
...Eso si, al llegar a la cima, las vistas sobre Urdaibai resultan una recompensa impagable...no tienen precio.
Tras visitar el buzón y rodear la ermita, el próximo destino es Ereño, lugar donde se encuentra la meta, esta vez en el centro del pueblo...
...Y hacia allí me encamino, repitiendo en un tramo el camino de subida y cruzándome con los corredores/marchadores que van subiendo hacia la ermita.
De aquí al final poco más que reseñar, a no ser que durante la bajada, corro en un tramo perdido al no desviarme de una pista de hormigón por no ver las marcas. Afortunadamente, el trazado por sendero vuelve a coincidir con la pista a unos pocos cientos de metros, al llegar al fondo del valle, por lo que, tras saltar una valla, entro de nuevo en el trazado para afrontar el último repecho y entrar correctamente en la meta situada en Ereño.
Una vez en la meta y nada más entrar, el último avituallamiento. Esta vez más sólido...Todo un clásico.
Según mi crono, completé el recorrido en 3 h. 10 min 01 seg., por lo que mis objetivos iniciales estaban cumplidos.
Os pongo algunos parámetros y el perfil extraídos de mi GPS (algunos no resultan exactos por el momento de encendido/apagado del aparato).
Tras una ducha caliente, tomé camino a casa, no sin cierta pena puesto dejaba atrás un gran ambiente, tras haber disfrutado de una magnífica martxa, en un entorno incomparable, muy bien organizada y señalizada. Mención especial requieren todos los colaboradores de la organización los cuales brindaron, con mucha amabilidad y en todo momento, apoyo y asistencia a los participantes. Eskerrik asko!!!.
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